Los desfiles militares son un mecanismo interesante que ofrece lecturas tanto al interior de un país como al exterior. Si haces un desfile militar, muy posiblemente es que cuentas con los suficientes elementos, tanto a nivel de personal humano, como de aparatos militares, para ir y desfilar ante un comandante supremo de las fuerzas armadas.
Estos desfiles los hay a lo largo y ancho del planeta. Recientemente, hubo dos desfiles militares que han sido objeto de análisis internacional; por un lado fue el desfile militar de Estados Unidos y, por el otro, el desfile militar de China. Analistas de un lado y del otro hablan del poderío militar de China, y de alguna manera dejan entrever el desvanecimiento del poderío militar de EUA.
De todas estas lecturas hay una que quisiera destacar. El desfile militar de un país se hace también por un motivo al interior de cada país. El de ofrecer seguridad. Los desfiles militares también sirven para dar un mensaje al interior de la población, el de presentar las armas, para establecer un diálogo en el que se busca garantizar la seguridad interna de un país. Dicho de otro modo, se presentan las armas, para garantizarle al pueblo que existe la suficiente fuerza para defender al país de amenazas externas.
Este es un punto importante. Muchas han discutido sobre qué país, militarmente hablando, es más apto. Hemos visto que, de alguna manera, hay probada experiencia de un lado, es decir, Estados Unidos tiene presencia militar y ha estado en campañas militares de manera consuetudinaria, independientemente del resultado. Por el otro lado, China no ha mostrado experiencia militar, y necesita de otros con esa probada experiencia, que en todo caso es Rusia. Hay un input militar de un lado y del otro.
Por parte de Occidente hay tecnología y capacidad humana a nivel de campañas militares. Esto se obtiene desde el punto de vista de lo que está sucediendo en Ucrania. Por el otro lado, el Oso-Dragón entre Rusia y China presenta capacidad militar, tanto tecnológica como a nivel de capacidad humana. Esto demuestra que en ambos polos se están midiendo y estudiando.
Pero, lejos de dicho análisis, hay otro. Como lo dije anteriormente, hay una lectura alternativa que se da al interior de cada país. Dicha lectura tiene que ver con el ciudadano en la relación con su país. La narrativa en ambos desfiles militares es demostrar el poderío militar hacia afuera, pero también hacia dentro. Y hacia dentro, es demostrar la fuerza de protección que tiene cada país ante fuerzas extranjeras.
En una lectura muy interesante sobre la ilustración de Anthony Gottlieb. En uno de sus capítulos habla de Hobbes, el autor de la famosa obra El Leviatán. En el estudio hecho por Gottlieb sobre Hobbes, resalta un punto interesante, dónde Hobbes establece que aquel que tiene la suficiente fuerza para proteger a todos, tiene la suficiente fuerza para oprimir a todos. Este punto es relevante. Ya que se conecta con la tesis de John Gray sobre los nuevos leviatanes.
Gray es del punto de vista de que las libertades a nivel mundial se han ido reduciendo de manera paulatina. La libertad de credo no es tan libre si se ve como una amenaza para algún país. La libertad de opinión no es tan libre si esa opinión puede de alguna manera verse como una amenaza para la tranquilidad del país. Dicho de otro modo, los ciudadanos reducen su libertad y la intercambian por mayor seguridad. Lo que conlleva mayor vigilancia en todos los aspectos, como cámaras de seguridad con reconocimiento facial. Y la capacidad de estos mecanismos de seguridad para localizar y encontrar individuos que han expresado alguna opinión en contra del gobierno.
El punto importante es preguntarse si quienes detentan el poder gozan de un poder ilimitado. La respuesta a esa pregunta, tanto en China como en Estados Unidos, sugiere que existe un poder ilimitado por parte de quienes dirigen a dichos países. Por eso arquitectos políticos se han dado a la tarea de pensar cómo evitar que pocos detenten un poder absoluto. Montesquieu era de la idea de la división de poderes para evitar que existieran posibles actos despóticos en contra de la población.
El poder tiene que ser sujeto a revisión por otro poder. De otra manera, pueden existir actos despóticos en contra de la población. Es un punto fundamental en las democracias.
Toca a México su siguiente desfile militar. Hay preguntas que nos debemos hacer, una de ellas es si el poder militar mexicano es capaz de oprimir a toda la población, y la otra, es si estamos ante un posible nuevo leviatán.






Deja un comentario